Según la normativa vigente, para tener acceso a una pensión de jubilación de carácter contributivo, el trabajador debe haber cotizado un mínimo de 15 años a lo largo de su vida laboral. En consecuencia, si no llegas a ese límite, solo tendrás derecho a una PNC o pensión no contributiva.

Las PNC o pensiones no contributivas, son prestaciones económicas a la que tienen derecho todos los ciudadanos que no han cotizado lo suficiente, es decir, menos de 15 años, y que además acrediten tener una carencia de recursos para garantizar su subsistencia.

Para ser beneficiario/a de una PNC, debes cumplir estos 2 requisitos fundamentales:

• Tener 65 años o más cuando la solicites. 
• Es imprescindible haber residido legalmente en España durante al menos 10 años, desde que cumpliste los 16 años y la fecha de cobro de la pensión. Además, 2 de los últimos años deben ser inmediatamente anteriores a la fecha de la solicitud de la pensión no contributiva.

Por otra parte, a diferencia de las pensiones contributivas, cuyo importe es variable de una persona a otra, en función de las bases por las que haya cotizado a lo largo de su vida profesional, las PNC tienen una cuantía fija. Esto quiere decir que, a priori, el importe de las pensiones no contributivas es igual para todos los ciudadanos que presenten una cotización insuficiente y que cumplan con los requisitos establecidos.

La cuantía anual de las PNC está determinada por la Ley de Presupuestos Generales del Estado. Para este año 2024, el importe de las PNC ha quedado fijado en 7.250,60 euros anuales, divididos en 14 pagas (1 cada mes, más 2 extraordinarias en noviembre y en junio) de 517,90 euros mensuales. Por lo tanto, eso es lo que cobraría una persona que no haya cotizado lo suficiente para acceder a una Pensión Contributiva y que viva sola.

No obstante, dicho importe se podría ver incrementado si hay más convivientes dentro de la unidad familiar que dependan económicamente del solicitante. También, es posible cobrar un complemento, en caso de necesitar la asistencia de una tercera persona que le ayude a realizar las tareas de la vida diaria, tal y como informa la web del IMSERSO (Instituto de Mayores y Servicios Sociales).