El Ingreso Mínimo Vital es una prestación pensada para prevenir la exclusión social y el riesgo de pobreza, tanto de personas que viven solas como de aquellas que están integradas en unidades de convivencia, con menores o personas mayores a su cargo. No obstante, los beneficiarios del IMV pueden perder la ayuda, en caso de no cumplir con estas 8 obligaciones, según indica la web de la Seguridad Social:

• Proporcionar la documentación que acredite que se cumplen los requisitos para tener derecho a la prestación y a su conservación.
• Comunicar los cambios de situación, en un plazo de 30 días desde que se produzcan.
• Avisar de los cambios de domicilio.
• Hacer un reintegro de las prestaciones que se perciban de forma incorrecta.
• Comunicar al INSS si se produjera cualquier salida al extranjero.
• Presentar cada año la Renta.
• Cumplir con las condiciones establecidas si se compatibiliza el IMV con un trabajo.
• Participar en las estrategias de inclusión promovidas por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

La Seguridad Social ya ha adelantado las nuevas cuantías del IMV para 2024. En general, los beneficiarios de esta ayuda van a ver un incremento de un 6,8% con respecto a lo que han venido cobrando durante 2023. De tal manera que, un adulto solo cobrará 604 euros al mes, es decir, 7.253 euros al año. Así mismo, la máxima cuantía ha quedado establecida en 1.330 euros mensuales, unos 15.956 euros anuales, para determinadas unidades familiares.